El proyecto arranca con piso de más de 40 años cuyas instalaciones, tabiques, ventanas y acabados estaban en mal estado, envejecidos, rotos o descuadrados, pero que sin embargo guardaba un cierto orden —bien pensado por un arquitecto, sin duda, con oficio— que posibilitó respetar ciertos elementos e incorporar otros nuevos.
La estrategia consistió en concebir un espacio optimista para la vida con la luz como elemento moldeador del espacio, la madera como casi única materia prima y el tiempo detenido en una estructura —que se muestra incluso con sus heridas— que debidamente tratada convive de forma fluida con la contemporaneidad.
Arquitecto
Alfredo Sirvent Silveira
Localización
Vigo (Pontevedra)
Área
138 m²
Año
2014